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Nuestra fortaleza y diferenciación es la innovación

Ricardo Migueláñez. @Rmiguelanez

Desde el Grupo Alimentario de Innovación y Sostenibilidad (GIS), siempre hemos considerado, y en esta línea venimos trabajando con el sector desde hace muchos años, que hay que hacer cada vez mejor las cosas en todos los ámbitos de la producción de alimentos: bienestar animal, medio ambiente, seguridad alimentaria, salud de los consumidores, protección de los trabajadores y todo aquello que contribuya de forma positiva en todos los que producen alimentos y también de los que los consumen.

En este sentido y en una sociedad cambiante como la que tenemos, hay que valerse de todas las herramientas posibles para alcanzar las nuevas demandas que el consumidor lleva pidiendo desde hace ya tiempo y que se han intensificado a raíz de la pandemia sanitaria provocada por la Covid-19.

Desde mi punto de vista, es necesario aplicar la innovación para para poder dar soluciones a todas estas necesidades. Pero no cualquier tipo de innovación, sino aquella que consiga dar beneficios a los consumidores y, a la par, a todos los eslabones de la cadena alimentaria.

Una de estas "nuevas" demandas es la mayor preocupación por el medio ambiente por parte de las marcas. Cada vez hay más consumidores que se decantan por un producto respetuoso con el ecosistema, por empresas que tienen en cuenta en sus estrategias la lucha contra el cambio climático.

En este sentido, el pasado 17 de mayo, Día Mundial del Reciclaje, compartimos en una jornada online del GIS el gran esfuerzo que realizan la mayoría de empresas de nuestro sector en esta materia. Gracias a su trabajo se ha evitado, por ejemplo, la emisión de miles de toneladas de CO2 a la atmósfera. Es decir, el sector está dando respuesta a esa sostenibilidad que la sociedad demanda, y esto solo puede conseguirse gracias a la innovación.

La innovación se ha convertido en una necesidad para todas las empresas del sector que quieran adaptarse a los nuevos tiempos, mercados y demandas de los consumidores y sociedad en general. El sector agroalimentario debe encontrar soluciones sostenibles de futuro que permitan alimentar a la población mundial y producir alimentos de calidad y asequibles para aquellos grupos de población con menos recursos económicos, incluso dentro de los países más desarrollados.

La innovación es clave en este proceso, pero muchas veces existen trabas a su aplicación que entorpecen el camino. Se deberían acelerar los debates para analizar cómo sortear estos obstáculos y poder avanzar en la coordinación de los esfuerzos que algunas empresas e instituciones públicas están haciendo en esta línea.

Sin embargo, tengo miedo que la situación que viven las empresas hoy en día, donde todos los costes están más que ajustados, provoque una caída de la inversión en I+D+i, porque esta situación ya se vivió hace 10 años en la anterior crisis y no resultó nada positiva para el sector agroalimentario. Entre todos, sector público y privado, tenemos que intentar que no pase.

Nuestra fortaleza y diferenciación es la innovación, no la dejemos de lado.

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Grupo de Innovación Sostenible