Las empresas del sector alimentario juegan un papel fundamental para la consecución de la Agenda 2030. De forma general, en el proceso de introducción y mejora de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en la actividad empresarial, pueden identificarse aspectos fundamentales que sirven como base de actuación y promoción.
Por ello, durante los próximos meses analizaremos los indicadores más importantes a cumplir por cada uno de los ODS de la Agenda 2030 y ofreceremos algunas ideas para mejorarlos. Una hoja de ruta que puede ser de interés para las empresas que ya han apostado por cumplirlos en 2030, pero que también pueden animar a otros que aún no lo han hecho a comenzar este camino.
El ODS 2 tiene como objetivo poner fin al hambre: lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible para el año 2030. Sus metas atienden en primer lugar a la mejora de la alimentación a través del acceso de todas las personas a una alimentación sana, nutritiva y suficiente y la erradicación de todas las formas de malnutrición, y se ocupan también de la producción de alimentos, la agricultura y, en general, del sistema alimentario.
Pero, ¿cómo pueden ayudar las empresas a la consecución de este objetivo?
Indicador 1: Este objetivo se puede medir de una forma sencilla, ya que basta con ver el número de campañas de donación de alimentos para ONG. El ODS 2 tiene como objetivo poner fin al hambre: lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible para el año 2030. Sus metas atienden en primer lugar a la mejora de la alimentación a través del acceso de todas las personas a una alimentación sana, nutritiva y suficiente y la erradicación de todas las formas de malnutrición, y se ocupan también de la producción de alimentos, la agricultura y, en general, del sistema alimentario.
Por lo tanto, la guía del GIS recomienda que el número de acciones de donación/recolecta de alimentos organizadas anualmente podría establecerse en un mínimo de 2 eventos al año, debidamente acreditados, independientemente de campañas típicas como la de Navidad. Estas acciones de donación no serán tenidas en cuenta en función de la cantidad donada, ya que cada empresa realizará lo que crea conveniente en medida a sus posibilidades de empleados, recursos, etc. Otra forma de valorar este indicador sería como un porcentaje de su producción destinada a donación.
Acciones: Para contribuir a este ODS 2, las empresas pueden marcarse objetivos de recaudación de aportaciones voluntarias por parte de sus empleados en productos de primera necesidad para contribuir a la lucha contra la pobreza y familias en situación vulnerable. También podrían crearse campañas de recogida y donación de alimentos en nuestro país y en el extranjero.
Así, también podría donarse el excedente de comida de los comedores de las sedes de aquellas empresas que lo tengan, provocando un impacto positivo en la comunidad y evitando el desperdicio alimentario, favoreciendo a las personas más necesitadas.
Indicador 2: El segundo indicador para medir este objetivo es el número de acciones de voluntariado realizadas por la empresa al año con objetivos que contribuyan al hambre cero, o número de horas empleadas anualmente en acciones de voluntariado con esta finalidad.
Acciones: Las empresas deberían fomentar actividades de voluntariado para el reparto de estos alimentos a las familias en situación de vulnerabilidad, comedores sociales, etc., así como la preparación de menús solidarios y paquetes de alimentos para personas sin recursos.
