Eduardo Martinez de Ubago, Head of Sales & Marketing. España y Portugal en John Deere
A principios de siglo, John Deere manejaba en España y Portugal una red que superaba de largo el centenar de concesionarios. En la actualidad, ¿cuántos existen?¿Cuántos concesionarios son necesarios para ustedes en Ibérica?
En estos momentos contamos con dieciocho concesionarios que gestionan ciento cuarenta centros de ventas y servicio en España y Portugal. Sólo hay un objetivo detrás de esta consolidación de los grupos de propiedad: crear estructuras con la dimensión y los recursos suficientes para acompañar a nuestros clientes en el viaje de tecnificación, profesionalización y transformación digital en la que estamos inmersos. Acompañarlos significa dar un servicio excepcional, proporcionarles formación, asesoramiento, estar junto a ellos cuando nos necesiten. Y eso no se puede hacer sin un departamento especializado de técnicos e ingenieros dedicados exclusivamente a esto. La escala de concesionarios que hemos desarrollado garantiza el desarrollo de estas estructuras.
Este viaje hacia el mundo de la conectividad entre productor-máquina-distribuidor ¿se está haciendo a la velocidad adecuada? ¿puede dar lugar a un nuevo perfil de agricultor?
Sin duda se están definiendo diferentes perfiles de agricultores. Hay muchísimos agricultores que están apostando por seguir profesionalizando sus explotaciones, por la adopción de tecnología, de nuevas prácticas agrícolas… que en definitiva están transformando el sector para que continue siendo la referencia ya es en el mundo. Respecto a la velocidad, creo que el progreso está siendo muy bueno, aunque sin duda habrá que seguir adelante y acelerar esta transformación. Va a ser absolutamente necesario para cumplir con los objetivos de sostenibilidad que se están imponiendo en la agricultura… pero sobre todo para hacerlo de manera rentable, mejorando los rendimientos económicos, reduciendo los costes de producción y generando beneficios en las explotaciones agrícolas.
En línea con una búsqueda de una mayor sostenibilidad ambiental ¿veremos en el futuro tractores totalmente eléctricos que consigan altas potencias o cómo serán?
Ya tenemos equipos eléctricos sobre todo en espacios verdes y en bajas potencias. Sin duda veremos aumentar el umbral de potencia de los vehículos eléctricos. La clave en estos momentos es conseguir hacerlo con la autonomía suficiente que requieren las labores agrícolas. Para eso aún se tendrá que desarrollar más la tecnología de baterías. John Deere adquirió recientemente la empresa Austriaca Kreisel, especializada en tecnología de carga y almacenamiento eléctrico precisamente para acelerar este aspecto del desarrollo tecnológico. También veremos desarrollarse simultáneamente soluciones de propulsión con combustibles alternativos.
En este sentido, existen marcas que ya comercializan tractores de hidrógeno. ¿Qué planes tiene John Deere en esta materia o en el uso de otro tipo de energías renovables?
Hay varias líneas de investigación y desarrollo dentro de John Deere para la implementación de sistemas de propulsión con combustibles alternativos y renovables. El hidrógeno es una de ellas pero no la única. Hay que tener en consideración no solamente la viabilidad técnica de los equipos sino la viabilidad logística considerando las redes de suministro.
¿Están los agricultores totalmente concienciados con la sostenibilidad medioambiental y así obran en la adquisición de maquinaria agrícola?
La clave no está en la sostenibilidad ambiental de forma aislada, sino en conseguir conciliarla con la sostenibilidad económica. Y ahí efectivamente es donde tiene un papel clave la tecnología y la agricultura de precisión. Los agricultores se deciden cada vez más por soluciones tecnológicas que reduzcan los insumos, no ya por su impacto en la sostenibilidad ambiental exclusivamente, sino porque consiguen además reducciones importantes en los costes de producción.
En noviembre de 2022 se inauguraba el John Deere Parla Innovation Center. ¿Qué balance puede hacernos del trabajo realizado en este tiempo?
El balance es extraordinario. En muy pocos meses tenemos ya varios trabajos de investigación muy prometedores, tesis doctorales, varias Start ups integradas en el centro y una creciente actividad de la cátedra de empresa firmada con la Universidad Politécnica de Madrid -incluyendo la colaboración en el máster de Agricultura de Precisión-. La apuesta por un ecosistema de innovación abierto ha sido sin duda un éxito del que se beneficiarán el última instancia los agricultores.
¿De qué manera pueden beneficiarse los agricultores españoles de los proyectos llevados a cabo en este centro?
Todos los proyectos que estamos emprendiendo tienen un denominador común: Desarrollar tecnologías, sistemas o prácticas agrícolas que consigan reducir los costes de explotación y hacer más sostenibles las operaciones. Sostenibles en todas sus dimensiones: ambiental, económica y social. Ese es el principal beneficio para nuestros agricultores.
